Con la presencia del Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, inició la última jornada del XI Congreso de la Unión de Periodistas de Cuba (UPEC).
En la cita, a la que también asiste el miembro del Buró Político y Secretario de organización, Roberto Morales Ojeda; el miembro del Secretariado del Comité Central y jefe de su Departamento Ideológico, Rogelio Polanco Fuentes, y la vice primera ministra, Inés María Chapman, se debate sobre la transformación del modelo de prensa en Cuba.
¿Por qué es importante un nuevo modelo de gestión de prensa? Al presentar la ponencia, Ricardo Ronquillo Bello destacó que en sus antecedentes, se evaluó la concordancia entre las preocupaciones que están a nivel político y profesional.
Desde el último Congreso –hace cinco años– precisó, ha cambiado sustancialmente la situación, insistiendo en la idea de que en este periodo se han creado las bases políticas, legales e institucionales para la Transformación, «pero tener una Ley de Comunicación no resuelve por sí mismo los problemas de nuestro modelo de prensa».
Sobre la legitimidad, en un contexto donde han cambiado las reglas de la comunicación, resaltó se necesita que nuestros medios cuenten con la mayor autoridad y crédito entre la ciudadanía.
«Que el sistema de medios públicos de la Revolución sean esenciales para el pueblo hay que pelearlo todos los días desde las propias agendas y en la misma medida en que estén conectados con sus audiencias», significó.
El experimento, dijo, no es una propuesta vertical, crea un marco común para que cada medio diseñara su propio proyecto de cambio desde la discusión colectiva de sus profesionales y del liderazgo de sus directivos.
Por otra parte, Jorge Legañoa comentó sobre la ruta para la transformación editorial de los medios de comunicación nacional y otras cuestiones asociadas a la credibilidad, analizada desde la ciencia.
¿Somos creíbles ante una audiencia fragmentada de información?, inquirió. El sistema mediático cubano, resaltó, aún no ha perdido la hegemonía de la comunicación.
Destacó que a pesar de la impronta de los medios que han apostado a la transformación, son comunes elementos en la arquitectura que se busca para la gestión editorial.
Entre ellos, mencionó el transitar del esquema tradicional de medio de comunicación a multimedio, complementariedad entre la gestión editorial y económica orientada al cumplimiento de la función social clave del medio, construcción de una agenda mediática cercana a los públicos y transformar las organizaciones en fábrica de contenidos desde lo informativo, la investigación y lo lúdico, entre otros.
«Toca usar las herramientas y proponer los imprescindibles cambios para la transformación del sistema de medios del país», precisó.