Los cubanos lideran casi todos los casilleros ofensivos en clásicos mundiales

La selección nacional que participará en el V Clásico Mundial de Béisbol continúa su preparación, enfrentándose a máquinas de mayor velocidad de lanzamiento, para ajustarse a la exigencia de este torneo Mientras en Japón la selección nacional que participará en el V Clásico Mundial de Beisbol continúa su preparación, enfrentándose a máquinas de mayor velocidad […]

La selección nacional que participará en el V Clásico Mundial de Béisbol continúa su preparación, enfrentándose a máquinas de mayor velocidad de lanzamiento, para ajustarse a la exigencia de este torneo

Mientras en Japón la selección nacional que participará en el V Clásico Mundial de Beisbol continúa su preparación, enfrentándose a máquinas de mayor velocidad de lanzamiento, para ajustarse a la exigencia de este torneo, y los lanzadores buscan acomodar sus brazos, continuamos mostrando la condición de principal animadora de la Mayor de las Antillas en tan encumbrada lid.

Solo cuando se compendia lo vivido sobre el terreno se alcanza a ver la magnitud de lo realizado. Por ejemplo, a la ofensiva ha sido tanto el protagonismo de los maderos cubanos en la historia de estos certámenes, que los casilleros de jits, dobles, triples, jonrones, impulsadas y anotadas están encabezados por jugadores de nuestro archipiélago.

Un nombre, inscrito en el equipo Todos Estrellas de los clásicos mundiales, ha copado la mayoría de esos galardones. El espirituano Frederich Cepeda, quien no está en la presente convocatoria, es el actual líder en imparables, con 32; en dobles, con ocho, cima compartida con el canadiense Justin Morneau; en impulsadas (23) y anotadas (19). Como si todo eso fuera poco, hasta hoy, es el segundo en vuelacercas (6).

En triples, el que más tiene es de Campechuela, en la provincia de Granma. Yoennis Céspedes posee tres de esos complicados batazos, que para alcanzar tal categoría deben conjugar fuerza y velocidad en las piernas del bateador. Otro que disparó su carrera desde los terrenos granmenses, en Bayamo, es el puntero en palos de vuelta entera. Alfredo Despaigne ha despachado siete pelotas por encima de las cercas de los clásicos mundiales.

Terminada la quinta edición, él pudiera seguir como cacique de la aldea jonrón. Finalizó bien la liga japonesa, además, se le ve con mejor físico y muy motivado, aristas que pudieran aportarle al incremento de esa cifra. De los cuatro que le siguen en el Top 5 de los batazos de cuatro esquinas, solo uno estará sobre los terrenos en la actual versión del principal torneo de selecciones nacionales, el venezolano Miguel Cabrera, quien acumula seis. El experimentado jugador de Tigres de Detroit en la Major League Beisbol (MLB) posee una marca –en esa pelota– de 507 bambinazos, aunque en la campaña pasada solo quedó en cinco.

Por supuesto que el beisbol es un deporte colectivo, y necesita del concurso de las virtudes de cada pelotero. Hoy, el también llamado Caballo de los caballos, aunque tiene la responsabilidad de remolcar carreras, encuentra un equipo de mucha más solvencia ofensiva, con jugadores de buen contacto, habilidosos en la selección de los lanzamientos, y también con fuerza. Esas cualidades de conjunto lo liberan un tanto, si bien no de su encargo, de la presión de ser prácticamente el único en el que descanse la probabilidad de producir.

No obstante, quien conoce a Alfredo Despaigne sabe que ni regala ni presta su responsabilidad en home, está hecho para hacernos vivir momentos grandes, como el último de sus jonrones, en el IV Clásico Mundial, con bases llenas, para definir el juego, por 4-3, ante Australia, que le dio a su equipo el pase a la segunda ronda.

Periódico Granma

Comparte si te ha gustado
Scroll al inicio