
Laider y su familia fueron reubicados en carpas familiares donadas por el Programa Mundial de Alimentos tras perder su casa por el paso del huracán Oscar, en una zona vulnerable; ahora esperan por una de las 18 viviendas iniciales- con tres cuartos, piso pulido, baño sanitario y cubierta ligera de zinc- que se entregarán el 30 de diciembre próximo.
Para ella, tener un techo donde resguardarse es motivo de felicidad, “realmente estoy contenta; es mejor que lo que teníamos antes”, afirma con gratitud hacia los constructores que trabajan arduamente para hacer realidad este sueño y junto a su esposo campesino y sus dos hijos médicos, colaboran con ellos y brindan meriendas como un gesto de apoyo mutuo.
Está decidida a adaptarse a esta nueva vida, soy educadora de la primera infancia en la escuela Blas Roca, también seriamente afectada, y si hacen una escuela vengo para acá, responde al preguntarle sobre su integración a los nuevos servicios que se crearán más adelante.
Sobre esas facilidades para la nueva comunidad, Yoenis Rodríguez Planche, director de la Unidad Empresarial de Base, UEB, de la Empresa Provincial de la Construcción, Epcons Manuel Tames, detalló que este asentamiento contará con servicios como bodega, escuela y consultorio, entre otros.
Entregarán 11 viviendas de tipología dos combinadas (mitad madera y mitad bloque), las cuales están a más del 90 por ciento de ejecución en la etapa de piso, pintura, instalación eléctrica, con la presencia de 100 trabajadores de cuatro municipios.
El trabajo es duro, pero no cesan en su empeño; laboran desde las seis de la mañana hasta que la escasa luz solar les impide continuar, así lo detalla Andrés Carbonel, miembro de Epcons Guantánamo, quien comenta que están allí desde el 2 de diciembre y se mantendrán hasta el 27 para culminar la obra.
Se alberga en la zona de La Playa, en el campamento de pioneros, y se incorpora diariamente al duro trabajo.
Los más avanzados son los 48 trabajadores de la Empresa Provincial de Materiales de la Construcción, Epmalco, su directora, Yanisleidis Matos Oliva, explicó que tienen sus siete viviendas al más del 97 por ciento en ejecución gracias a cinco brigadas de distintos municipios comprometidas a entregar los inmuebles este 25 de diciembre, por lo cual trabajan hasta largas horas de la noche para cumplirlo.
El próximo año continuarán con la labor, Epmalco construirá siete viviendas más y Epcons cinco, para completar las 30 propuestas; no obstante, según indican, prevén un aumento en los esfuerzos constructivos para trasladar a las personas que habitan cerca del río y evitar futuras incidencias.
Los damnificados agradecen el esfuerzo con sonrisas que contrastan con sus pérdidas, una de ellas es Marvelis Matos, operaria de Higiene y vecina de Los Pinos, que también ha visto cómo este proyecto le ha cambiado la vida.
Ella no considera su ayuda hacia los constructores como una necesidad únicamente, pues recuerda cuando su familia no tenía ni un utensilio para comer, los vecinos, colegas y amigos le tendieron la mano sin dejarla desamparada.
Así retribuye esa solidaridad a quienes se esfuerzan por ofrecerle un techo y continúa el ciclo solidario que le devolvió la esperanza y una actitud positiva tras el trauma causado por el meteoro.
(Con información de ACN)