
Por: Luis Carlos Frómeta Agüero
El objetivo es rendir homenaje a todos los conservadores y restauradores de piezas históricas y culturales del mundo. Estas personas no solo adquieren un compromiso con los dueños de las piezas o los autores de las mismas, porque ellos son los encargados de preservar el legado cultural y artístico de la humanidad, y salvaguardar las técnicas originarias con las cuales se crearon cada uno de los objetos que ellos restauran o conservan.
Un conservador, es el responsable de investigar, divulgar, exponer y ordenar las diferentes exhibiciones dentro de un museo. En pocas palabras, es quien documenta todo lo concerniente a un tema en particular, contacta a los diferentes museos y centros de investigación artística e histórica del mundo y genera una propuesta educativa para la sociedad.
También resguarda las piezas mientras están bajo su supervisión, procurando que se mantengan limpias, sin daño alguno e incluso en ocasiones, pide que se restauren.
Un restaurador es el encargado de preservar una obra u objeto deteriorado, intentando llevarlo a su estado original en la medida de lo posible y así lograr que el objeto no mute a lo largo del tiempo.
Ambos profesionales se encargan de preservar las obras, estudiando sus componentes y evaluando cuales de sus características pueden ser deterioradas más rápidamente por el entorno. De esta forma el restaurador crea un ambiente propicio para que dicho deterioro se produzca más lentamente.