El solemne evento, organizado por la Embajada de Cuba ante la Santa Sede, se celebró la víspera en la Basílica de Santa María en Aracoeli, de Roma, presidido por el jefe de esa misión diplomática, René Mujica, y contó con la presencia del monseñor Paul Richard Gallagher, secretario para las Relaciones con los Estados del Vaticano.
El embajador cubano destacó en su intervención las “convergencias de carácter sustantivo entre la Santa Sede y Cuba, en torno a la centralidad de principios y valores como la cooperación, la solidaridad, la fraternidad, la justicia y la paz”.
También en la defensa de “la dignidad para todos los pueblos y para todos los seres humanos, con atención particular a los más vulnerables y desfavorecidos, así como en la utilización sostenible y equitativa de los recursos naturales”, como expresó el “querido y recordado papa Francisco”, al proclamar el Jubileo de la Esperanza en este año 2025.
Participaron, además, la embajadora de Cuba en Italia, Mirta Granda, el consejero para Asuntos Internacionales de la ciudad de Roma, Mariano Angelucci, autoridades de la Santa Sede, miembros del cuerpo diplomático acreditado y otros invitados.
Mujica enfatizó que Cuba y el Vaticano “han sostenido relaciones diplomáticas ininterrumpidas sobre la base de las normativas internacionales, y se han caracterizado por un activo diálogo de alto nivel”.
En tal sentido, recordó las visitas oficiales al Vaticano de los presidentes cubanos Fidel Castro, en 1996, y Raúl Castro, en 2015, quienes fueron recibidos por los papas Juan Pablo II y Francisco, respectivamente, así como la del presidente Miguel Díaz-Canel en 2023, recibido por Francisco.
También se refirió a los viajes apostólicos a Cuba de los papas Juan Pablo II, en 1998, recibido por el presidente Fidel Castro, así como Benedicto XVI en 2012 y Francisco en 2015, durante la presidencia de Raúl Castro, y la visita a La Habana de este último pontífice en 2016, para su encuentro con Kirill, patriarca de Moscú.
Por su parte, el monseñor Gallagher hizo referencia a su reciente visita a Cuba, a inicios del presente mes, en el marco del aniversario de las relaciones, donde participó en la celebración de una misa en la Catedral de La Habana y sostuvo un encuentro con el presidente Miguel Díaz-Canel.
“La Santa Sede desea reiterar su deseo de seguir trabajando juntos, cada uno en su misión, con armonía y creatividad, para construir una sociedad más justa, inclusiva y esperanzadora”, manifestó el secretario para las Relaciones con los Estados.
En la parte cultural de esta celebración, la renombrada soprano cubano italiana, Monica Marziota, ofreció un concierto de música sacra, con el estreno mundial de su nuevo álbum Anima Mundi, que incluye canciones en lenguas ancestrales como el náhualt, taíno, yoruba, guaraní y latín.
En este evocador contexto, las canciones en lenguas antiguas, interpretadas por Marziota, “se convierten en la voz de la esperanza y de la relación entre los pueblos”, expresó el monseñor Gallagher.