Esta instalación será mucho más grande que la que tienen hoy, y el proyecto avanzará por fases, para comenzar a producir mientras se habilita.
Aunque el principal producto de la inversión son las salchichas, que aspiran a vender también en moneda nacional, Richmeat de Cuba S.A. ha previsto la elaboración de nuevos surtidos como hamburguesas y albóndigas.
No obstante, mantenemos la misma línea de producción inicial, que son las carnes molidas (picadillo) de ave con cerdo y de res, suministrando unas 2 500 toneladas métricas mensuales, puntualizó.
Con esta segunda fábrica, podrían aumentar su capacidad hasta 10 000 toneladas métricas, que equivalen a cerca de 350 contenedores de producto cárnico, con lo que estiman abastecer el mercado local, explicó Chapela Díaz.
Por ahora, la cadena logística de distribución solo incluye la región occidental y parte del centro, pero proyectan ajustes para integrar más unidades de transporte y llegar a la zona oriental del país.
Chapela Díaz precisó que utilizan materia prima de producción nacional y complementan con suministros de importación, a fin de garantizar los niveles de fabricación, pues les resulta importante «lograr encadenamientos productivos eficientes con los proveedores, y para ello estamos creando mecanismos que logren una mejor integración con la industria nacional, y que esta fórmula sea un ganar-ganar; desarrollen y tengan más capacidades para sus producciones, y nosotros logremos abastecernos del mercado local», dijo.