
La convocatoria de Fiscalización señala que deben explicar sus acciones y omisiones con relación a los hechos en la sede diplomática, que constituyen violaciones a la Constitución, la Convención de Viena sobre relaciones diplomáticas, y el Código Orgánico Integral Penal.
La Policía Nacional de Ecuador irrumpió en la noche del viernes 5 de abril en la embajada de México en Quito para detener al exvicepresidente ecuatoriano Jorge Glas, que había solicitado asilo político.
La invasión a la legación generó el rechazo de diferentes países y organizaciones internacionales, que manifiestan preocupación por lo ocurrido.
A raíz de los acontecimientos México rompió relaciones diplomáticas con Ecuador porque en opinión de sus autoridades se trata de una violación a la soberanía, al derecho de asilo y al de todas las naciones a tener protección de sus embajadas
El Ejecutivo ecuatoriano insistió en justificar el operativo ante organismos internacionales como la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac).
Ante ese bloque regional, la canciller Sommerfeld manifestó que para el gobierno de Ecuador la concesión de asilo a Glas es un «acto ilícito» porque sobre él pesan procesos judiciales, aunque para muchos es un perseguido político.