
Así lo evaluó la Asociación de Textiles y Confección de Ciudad Ho Chi Minh, la cual dijo esperar que los nuevos aranceles se reduzcan a entre un 20 y un 25 por ciento y que la aplicación de los mismos se retrase entre 30 y 45 días para minimizar el impacto en las mercancías en tránsito.
La valoración fue hecha pública en un encuentro organizado por el Departamento de Industria y Comercio de Ciudad Ho Chi Minh y en el cual el presidente de la Asociación de Empresas de esa urbe, Nguyen Ngoc Hoa, consideró el nuevo arancel inevitable, por lo que la estrategia de negociación debe centrarse en lograr el nivel más favorable posible.
En opinión de Ngoc Hoa, citado por la agencia de noticias VNA, para adaptarse a los nuevos impuestos las empresas deben reducir costos de producción y recibir apoyo gubernamental.
Entidades de diversas ramas coincidieron en señalar que Estados Unidos es un mercado crucial, por lo cual es necesario evaluar de manera integral el impacto de los nuevos aranceles, y el Gobierno, los ministerios y las administraciones locales deben implementar soluciones específicas para cada sector afectado.
Además del apoyo gubernamental, las empresas deben ser proactivas en la búsqueda de nuevos mercados de exportación y el desarrollo del mercado interno, y aprovechar esta crisis como una oportunidad para reestructurarse y fortalecer la posición de Vietnam en el comercio global, consideraron.
Al respecto, el rector de la Universidad de Economía y Derecho de Ciudad Ho Chi Minh, Hoang Cong Gia Khanh, reconoció que los nuevos impuestos plantean varios desafíos, debido al desequilibrio comercial entre Vietnam y Estados Unidos, el tipo de cambio entre ambas monedas y la implementación de la propiedad intelectual, entre otros.
Según el académico, la nación indochina debe integrarse más profundamente y aprovechar los acuerdos de libre comercio (TLC) de nueva generación. La estrategia –dijo- debe centrarse en hallar nuevos nichos de mercado, la mejora de los productos, alcanzar estándares más altos y atraer más inversión estadounidense.
Por otra parte, una medida defensiva es monitorear el fraude de origen para evitar que productos extranjeros se hagan pasar por vietnamitas, consideró Gia Khanh.
En la reunión trascendió que, a partir de mayo próximo, muchas entidades suspenderán temporalmente los pedidos de exportación a Estados Unidos, mientras desarrollan estrategias para enfrentar la nueva situación.
De acuerdo con los dispuesto por el presidente estadounidense, Donald Trump, la aplicación de un arancel recíproco del 46 por ciento sobre los productos importados de Vietnam se haría efectiva a partir de hoy, 9 de abril.