En el espacio Arena Cinema de esa feria, sus organizadores programaron la víspera un acto de apoyo a la nación caribeña, con la participación de la embajadora de ese país en Italia, Mirta Granda, así como del presidente de la Asociación Nacional de Amistad Italia-Cuba (Anaic), Marco Papacci y del líder del partido Patria Socialista, Igor Camilli.
Granda agradeció la asistencia de cientos de personas, en representación del amigo pueblo italiano, a ese evento, durante el cual se proyecto el documental Buena Vista Social Club, en homenaje a la cultura de la Isla.
La embajadora recordó que “la revolución cubana que triunfó en 1959 fue una revolución eminentemente cultural”, y agradeció a los promotores del festival por pensar en la exhibición de este filme sobre “un tesoro musical tan entrañable a nuestra Cuba”.
Señaló que, la cultura cubana es reconocida en el mundo por sus valores, y manifestó que la misma se enriquece desde la base misma de la sociedad, pues “los cubanos ejercen su derecho a la cultura en todo su esplendor”
“Por eso hay tantos talentos porque se cultivan y se le da la oportunidad al pueblo para aportar lo mejor de sí a la cultura cubana”, añadió la diplomática.
Por su parte, el presidente de la Anaic se refirió a la importancia de incrementar en estos momentos la solidaridad con Cuba, que enfrenta un criminal bloqueo económico, comercial y financiero norteamericano, “genocida, que intenta asfixiar a ese pueblo”, impuesto desde el mismo triunfo revolucionario, y recrudecido en los últimos años.
“Los Estados Unidos tratan de impedir que la Isla pueda tener su independencia, su autonomía, su autodeterminación y ¿quieren saber por qué?, porque hicieron una revolución socialista a solo 90 millas de sus costas”, dijo Papacci.
Se refirió a proyectos que desarrolla la Anaic, entre ellos el envío de marcapasos, el apoyo a la investigación de una vacuna contra el dengue y el financianciamiento de la producción de heparina, medicamento de gran prioridad.
Finalmente, el secretario general del partido Patria Socialista destacó la importancia del ejemplo de Cuba, “una gran patria cuyo pueblo hizo y defiende una revolución no solo política, sino cultural, social”.
En relación con el bloqueo estadounidense a esa nación, aseveró que “las sanciones pueden bloquear las economías, pero no pueden bloquear la libertad de los pueblos y sus ideas”.
“Cuba es un faro cultural e ideológico importante, y es la muestra de que un pueblo que resiste con una idea muy precisa, puede construir su propio proyecto social a pocas millas del peor capitalismo del mundo”, enfatizó Camilli.
