La celebración de la efeméride deviene en homenaje y compromiso para avanzar en las reparaciones de los centrales, el alistamiento de la maquinaria agrícola, las actividades de siembra, cosecha, corte y tiro de la caña.
En ese propósito se trabaja en las unidades del Enidio Díaz Machado, de Campechuela y el Arquímides Colina Antúnez, de Bayamo, ambos con el reto de adelantar la arrancada, hacerla eficiente y de superior estabilidad productiva.
Leticia Marrero Fernández, directora de Coordinación y Supervisión Técnica del Grupo Azucarero Azcuba, en la provincia, señaló que aunque las reparaciones industriales hasta octubre se enmarcan en lo previsto, enfrentan afectaciones con el fluido eléctrico y la insuficiente disponibilidad de materiales y piezas que emplean en los equipos y medios técnicos.
Mientras, el punto crítico de la contienda azucarera está en el plan de siembra de caña, el cual presenta atrasos significativos para la fecha, fundamentalmente, por la falta de combustible físico.
Marrero Fernández dijo que necesitan lograr en la etapa de frío la siembra de unas mil 500 hectáreas que garanticen la semilla del próximo año 2024.
Asimismo, las empresas agroindustriales azucareras Grito de Yara, Bartolomé Masó y Roberto Ramírez concentrarían fuerzas para las siembras, cosecha, corte y tiro de la caña, con el objetivo de realizar vinculaciones con los dos ingenios granmenses que estarán en activo y a su homólogo de Majibacoa, en Las Tunas.