“A partir de este jueves se acrecientan las posibilidades de lluvias para la provincia, las cuales pueden ser numerosas, sin embargo, no se comparan ni remotamente con la vaguada que anteriormente incidió en la geografía granmense“, aseveró Ezequiel Cadrelo Corría, Especialista del Centro Meteorológico provincial durante su participación en el programa Perspectivas de CNCTV Granma.
Para el viernes, refirió, se esperan lluvias más débiles, un contexto al que se debe prestar especial atención en el territorio por los niveles de lluvias acumulativos en el territorio.
La provincia, según el Puesto de mando de Recursos Hidráulicos registró acumulados de precipitaciones mensuales que superaron, hasta el día de hoy, en un 130 por ciento el récord establecido para el mes de junio, de 168 milímetros.
Desde junio se acentuaron estas condiciones de lluvias por varias causas: la persistencia de una vaguada que estuvo del 1 al 2 con lluvias muy fuertes, por encima de 200 milímetros, incluso, superior al acumulado histórico de precipitaciones del mes de mayo, de 172 milímetros y muy pegado a este primer evento lluvioso, incidió una segunda vaguada de tres días, del 7 de junio y hasta el 9 de junio, con lluvias fuertes e intensas.
“Este segundo evento meteorológico fue el de mayor incidencia, dado el vapor de agua de los vientos del sur, que activaron aún más las lluvias y potentes descargas eléctricas.
“La provincia que ya tenía un precedente de lluvias anteriores complejiza su situación, al punto que en dos días cayeron 500 milímetros de lluvias en el territorio de Jiguaní, uno de los más complejos junto a los municipios montañosos.
“Durante el primer evento meteorológico, si bien llovió en toda Granma, Bartolomé Maso y una parte de Media Luna fueron los que más lluvias recibieron, con promedios entre 250 y 300 milímetros, recordemos que para entonces las presas estaban por encima del 60 por ciento de su capacidad”, remarcó Cadrelo Corría.
El especialista, subrayó que las lluvias acumuladas durante 48 horas, los días 1 y 2 de junio, promediaron entre 220 y 300 milímetros, o sea que en estas condiciones, Granma recibe una segunda vaguada, más fuerte, lo que torna más crítica la situación.
“Durante los tres días que transcurre la segunda vaguada, estos municipios montañosos acumularon lluvias por encima de los mil milímetros, lluvia que al final debe escurrir hacia el llano, a lo cual se suma el estado de los embalses, a más de un 95 por ciento de llenado lo cual complejizó la situación de Granma”, puntualizó Cadrelo Corría.