Previsto para realizarse el 18 y 19 de noviembre en la capital cubana, al encuentro asistirá la también educadora de Lenguas Extranjeras María Teresita Campos, ambas en representación de la Asociación de Cubanos Residentes en Brasil.
«En estos tiempos convulsos resulta vital y necesario este evento porque la patria es espíritu y se funda en una acumulación de valores, con los que se conecta a todos sus hijos», declaró Rodríguez a Prensa Latina.
Aludió que más allá de las ineludibles condenas al inicuo bloqueo de Estados Unidos que gravita por más de seis décadas sobre «nuestro pueblo, dentro de las propuestas que llevaremos al foro figura la de dar continuidad al proceso de normalización de las relaciones entre Cuba y sus residentes en el exterior».
De igual manera, «daremos voz y trasladaremos a la conferencia el agradecimiento de nuestros residentes en el gigante sudamericano por las medidas adoptadas por el Gobierno cubano a la extensión de validez del pasaporte».
Asimismo, puntualizó, a la eliminación de la prórroga y a la posibilidad de obtener algunos documentos de suma importancia para la adquisición de trabajos en el exterior.
La docente de Lenguas Extranjeras reconoció el valor y trascendencia de la cita, pues se celebrará después de la pandemia de Covid-19 y en momentos en que ocurren capitales transformaciones políticas, económicas y sociales en la isla y en el mundo.
Abogó por una reunión de calidad, con multiplicidad de criterios, pero buscando «reafirmar la unidad por la patria en la variedad y también de la variedad en la unidad».
«Los hijos, en cualquier lugar en que se encuentren, debemos servir a la patria con hechos, pues resultaría absurdo recurrir solo a palabras», remarcó Rodríguez, convencida de que se puede estar muy lejos de la isla, pero «no puedes arrancar el país del corazón del cubano».
Según la convocatoria de la IV Conferencia, los asistentes dialogarán sobre los vínculos de Cuba con sus connacionales en el exterior y las perspectivas de ese nexo.
Durante los dos días de sesiones se abordarán los temas migratorios y otros referidos a la cultura y la identidad, al desarrollo económico y las inversiones con la participación de cubanos en los procesos socioeconómicos que tienen lugar en el país.
Cuba respalda el fortalecimiento de los vínculos con sus nacionales residentes en el exterior, en función de la defensa de su soberanía e impulsa políticas que estimulan una mayor participación de estos en los procesos de desarrollo cultural y socioeconómico que despliega la isla.