En el estadio Julio Antonio Mella, donde los locales se han mostrado casi invencibles, los dirigidos por Eddy Cajigal deberán apelar a su artillería pesada —mermada por la ausencia de dos de sus figuras clave— para lograr un triunfo crucial antes de regresar al Guillermón Moncada.
Los indómitos no contarán con Yoelquis Guibert, líder en average y jonrones de la fase regular, ni con Yoel Yanki, ambos contratados en el extranjero. A eso se suma un cuerpo de lanzadores poco dominante y una defensa inestable, por lo que el peso del desafío recaerá sobre su ofensiva.
En el primer juego de la serie, Santiago cayó 4-5 pese a una rebelión en el tramo final, donde llenaron las bases sin poder concretar el batazo decisivo. El cerrador tunero Alberto Pablo Civil, habitual seguro del bullpen, dejó el juego con los ángulos llenos, pero Yanielquis Duardo entró al rescate: permitió un hit de Osvaldo Abreu que empujó dos carreras, pero cerró el partido con un ponche.
La conexión decisiva del choque fue un cuadrangular de Luis Vicente Mateo con dos corredores a bordo, ventaja que los Leñadores nunca perdieron desde el primer tercio.
Hoy los santiagueros confiarán en la experiencia del veterano y campeón olímpico en Atenas 2004, Danni Betancourt, mientras que los anfitriones enviarán al montículo al derecho Alejandro Meneses.
Esta jornada servirá también para el traslado de los contendientes del otro cruce semifinal. Mañana, Industriales de La Habana —derrotado en sus dos primeros encuentros— recibirá en el Latinoamericano a los invictos Tigres de Ciego de Ávila.