
La reedición del acontecimiento comenzó, como cada año, a las 5:15 de la madrugada, tal como ocurrió en igual fecha de 1953, y constituye una tradición que el pueblo de Bayamo se concentre en el antiguo enclave militar, hoy parque-museo Ñico López, para rendir tributo a quienes participaron en la patriótica gesta.
En la acción del 26 de julio de 1953, en Bayamo no cayó ningún combatiente, sino que luego fueron asesinados José Testa Zaragoza, Rafael Freyre Torres, Lázaro Hernández Arroyo, Rolando San Román de la Llana, Pablo Agüero Guedes, Hugo Camejo Valdés, Pedro Véliz Hernández, Ángel Guerra Díaz, Mario Martínez Arará y Luciano González Camejo.