
Cirilo, medallista de bronce olímpico en París 2024, cruzó la meta con un tiempo de 46.66 segundos, el mejor de su serie, suficiente para asegurar el boleto directo a semifinales y dejar claro que no viajó a Italia para ser espectadora.
Dueña de un palmarés que incluye cuatro preseas mundialistas y un oro panamericano en Santiago 2023, Cirilo mostró la solidez de siempre: arrancó fuerte, controló la carrera con ritmo seguro y remató con la autoridad que ya la caracteriza en esa distancia.
El calor y la presión de la pista no fueron rivales para la única representante cubana en esta cita, que vuelve a colocar su nombre entre las grandes de la especialidad.
Ahora le espera la semifinal del sábado, donde tendrá contrarias de peso provenientes de Hungría, China y Brasil, pero también la oportunidad de volver a una final planetaria. La joven de 23 años, que ya sabe lo que es subir al podio en eventos de máximo nivel, parece decidida a ampliar su vitrina y, de paso, mantener viva la tradición del canotaje cubano en los escenarios más exigentes.