
La selección de Cuba logró su primera victoria en el V Clásico Mundial tras superar a Panamá 13×4, en el estadio Internacional de Taichung, en China Taipéi.
Los de la Mayor de las Antillas llegaron a este duelo con la soga al cuello, después de dos derrotas en sus primeros partidos contra Holanda (2-4) e Italia (3-6), pero lograron desplegar una ofensiva de 21 hits, una cifra que rompió el récord de indiscutibles de equipos nacionales en clásicos mundiales, que era de 17 ante México, en el torneo de 2009.
Esta vez los ligamayoristas Yoan Moncada y Luis Robert Jr sí lograron sacudirse de la baja ofensiva que padecieron en los primeros encuentros, algo que pareció estimular al resto de sus compañeros, entre ellos a Yadir Drake, autor de cuatro incogibles en igual cantidad de veces oficiales al bate.

La victoria se la llevó Luis Miguel Romero, segundo relevista empleado por Armando Johnson, quien abrió el choque con Ronald Bolaños en el montículo.
El partido estuvo nivelado hasta la mitad, pero Cuba no tuvo piedad a partir del sexto con ninguno de los lanzadores que envió el Alto Mando panameño a la lomita.
Como muchos habían sugerido, Roel Santos volvió al line up como primer bate y lo hizo muy bien, con tres imparables.
Por su parte Alfredo Despaigne pegó dos hits en cinco turnos, incluido el doble que puso la primera carrera de Cuba en el pizarrón.
Con el resultado de hoy los dirigidos por Armando Johnson mantuvieron opciones de clasificar a la siguiente ronda, pero siguen dependiendo de lo que hagan otros equipos para irse a las famosas cuentas de desempate del TQB.