Madrid, 14 dic (Prensa Latina) La locura del fútbol mundial se acerca a su fin en la liza de Qatar, con un termómetro europeo tambaleante que deja una sola bala en el colimador de los balones, Francia.
Esta noche se sabrá si por fin el actual monarca del orbe consigue llegar a su segunda final consecutiva y de cierta forma, dejar así muy complacida a la FIFA con el delicioso morbo de ver frente a frente a los galos de Kylian Mbappé frente a los argentinos de Lionel Messi.
Como casi toda la carne está en el asador, tendría además muchas tramas y subtramas. Desde el hecho de buscar el desempate en el Pichichi del torneo, entre los dos astros, ambos con cinco goles, hasta la oportunidad del francés de hacerse con sus máximos trofeos seguidos al estilo de Pelé.
Para el rosarino, que creció especialmente en su partido contra Croacia, el momento sublime de levantar, por fin, la Copa FIFA, tan anhelada, para repetir la proeza de su gran referente, Diego Armando Maradona.
Empero, vale la pena ir más despacio. Porque la última carta de la baraja europea no lo tendrá fácil contra el rocoso, ultradefensivo y también virtuoso Marruecos.
De cierto modo, como ya comentó el exitoso entrenador de los magrebíes, Walid Regragui, una apuesta sin precedentes de un equipo de los países en vías de desarrollo, contra Argentina, que igualmente lo es, y al mismo tiempo, es hoy el orgullo latinoamericano.
Como generalmente ocurre, los que ya están en casa eliminados, pasarán semanas preguntándose todavía en que fallaron, si el arbitraje tuvo alguna influencia en su contra o si la fecha del certamen qatarí les perjudicó en sus rendimientos.
En esos casos, todo pasado será peor que el presente y la única apuesta probable tendrá la mirada puesta en el futuro, con la Eurocopa de Alemania 2024 como punto de inflexión.
Con inquietud, seguramente los seguidores de los franceses sienten incomodidad al rememorar las palabras del exjugador camerunés y presidente de su federación de balompié de su país, Samuel Eto´o, quien vaticinó una disputa por la Copa Fifa el 18 de diciembre con Marruecos finalista.
El otro era Camerún, eliminado en la primera fase, pero en realidad pocos pronósticos son particularmente exactos. Así que los europeos, cuidado, que Marruecos puede terminar por amargarles la fiesta.