Como el pasado día 13, en la apertura de la triangular final, ambos conjuntos protagonizaron otro encuentro cerrado, aunque los Azucareros volvieron a inclinar la balanza a su favor.
A diferencia de ese desafío, que concluyó 1×0, ahora ninguno de los abridores pudo sostenerse sobre la lomita del estadio 26 de Diciembre, dejando el protagonismo a los relevistas.
Los campechueleros tomaron rápida ventaja de 3-0 en el episodio inicial y explotaron a Jorge Luis Garcés, pero sus rivales respondieron con tres rayas y mandaron a las duchas al zurdo Yunier Castillo.
Un boleto de Alexander Cabrales, con los ángulos repletos en el cierre del octavo capítulo, fue lo que necesitaron los vigentes campeones para romper el empate a cuatro carreras y endosarles un duro revés a sus contrarios.
Así quedaba decidido el partido, porque el refuerzo niquereño Yainier Hernández sacó los tres out del noveno, para apuntarse el triunfo, el tercero de los campechueleros en este segmento conclusivo.
Además, los alumnos del mentor Víctor Pérez conservaron el invicto y ratificaron su condición de principales aspirantes a la corona de la pelota granmense, que se definirá entre martes y miércoles, en Bayamo.
Allí, en el parque Mártires de Barbados, los Incendiarios bayameses están obligados a ganar los dos choques, incluyendo el último ante Campechuela, para forzar un empate en la cima y el juego extra por el campeonato.
De suceder lo contrario, los de la capital granmense (1-1) quedarían eliminados y los Azucareros eslabonarían su tercera corona consecutiva (su oncena de la historia), porque los yarenses (0-3) ya vieron esfumarse las opciones con el fracaso dominical.
