En la voz de representantes de organizaciones de la sociedad civil se escuchó cómo las familias cubanas son víctimas, de una forma u otra, de los efectos del genocida bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos a esta Isla indómita.
Dicha política, que lacera los derechos humanos, y su alcance multidimensional como el principal obstáculo para el logro de los objetivos de desarrollo sostenible en Cuba, fue el tema que centró los debates del XIX Foro de la sociedad civil cubana en contra del bloqueo, que tuvo como sede a la Universidad de La Habana.
Norma Goicochea, presidenta de la Asociación Cubana de las Naciones Unidas, explicó, al inaugurar el evento, que el bloqueo es el principal obstáculo para dar cumplimiento a la Agenda 2030 de la ONU y, en consecuencia, al Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social del país.
Por su parte, Francisco Pichón, coordinador residente del Sistema de las Naciones Unidas en la nación antillana, compartió el criterio de que el bloqueo, las restricciones unilaterales externas y la exclusión de Cuba de mecanismos e instrumentos financieros internacionales son un gran obstáculo para su desarrollo sostenible.
Los participantes aprobaron dos declaraciones que harán llegar al Secretario General de la ONU. Una de ellas argumenta el proyecto de Resolución que presentará Cuba, el 1ro. y 2 de noviembre próximos, en contra de la injusta política aplicada por la Casa Blanca desde hace más de 60 años.
El otro documento condena el genocidio de Israel contra la población en Gaza y Cisjordania, desde el 7 de octubre último.
Las declaraciones emanaron de los debates sostenidos en tres comisiones, que abordaron, entre otras temáticas, cómo poner fin al hambre como flagelo mundial, lograr la seguridad alimentaria, mejorar la nutrición y promover la agricultura sostenible.