
La política de la Vivienda, se ratifica aquí como uno de los programas priorizados por su alcance y beneficios sociales, de ahí que avanzar en su cumplimiento implica un desafío constante para todos los actores que intervienen en su ejecución, precisó Ernesto Ríos García, Viceintendente Municipal al frente de las tareas de la Construcción.
“El avance de este programa sigue siendo limitado a partir del déficit de recursos generalizado en todo el país, no obstante, para el periodo 2025 se estableció un cronograma para levantar 59 inmuebles, de los cuales 15 corresponden a la vía estatal, de ellas 3 a cargo de la Empresa Provincial de la Construcción; 4 de AZCUBA; 5 del MINAGRI y 3 Autofinanciadas, 2 del MININT y 1 del Molino Arrocero.
“También tenemos el encargo de construir 21 Células Básicas Habitacionales (CBH) o subsidios y apoyar otras 23 obras por la vía del Esfuerzo Propio”.
El directivo enfatizó que hasta la fecha ya se han culminado 3 viviendas, según el cronograma fijado en el territorio y se trabaja actualmente en otras 4, las cuales se encuentran en fase culminación.
“Los mayores atrasos se concentran en el cumplimiento de las 21 CBH previstas para el año teniendo en cuenta que los recursos para esta modalidad dependen de los suministros que recibe la entidad del comercio, los que han sido nulos durante todo el año, también afecta la falta de financiamiento a los subsidiados”.
“Sin embargo, de estas obras una se encuentra en estado de terminación, 4 en estructura, otras 4 en cimentación y las restantes 12 sin iniciar”.
Ríos García significó además que la actividad sismológica registrada recientemente generó más de 3 mil 400 afectaciones, de las cuales se han ejecutado 420 acciones, 370 en respuesta a daños parciales de techo y otras 50 destinadas a subsanar deterioros menores.
“Las restantes labores se ejecutarán en la medida de la disponibilidad de recursos que entren al municipio”.
En predios masoenses mantienen como prioridades para el presente años el incremento de la calidad de las obras, seguir trabajando los recursos naturales como la madera, la adaptación de locales y potenciar las culminaciones por esfuerzo propio.
En correspondencia con ello, argumentó el viceintendente, se potencia la producción de materiales alternativos de la construcción como es el caso de los ladrillos, gracias al empleo de leña en el proceso de horneado, procedimiento que antes se hacía con derivados del petróleo, casi siempre deficitarios en todo el país.
“La conversión de 2 de estos hornos y la construcción de otros 2, no solo ha permitido aumentar la capacidad instalada en El Tejar a 42 mil unidades por quemado, sino también reducir el costo de producción de cada unidad y por supuesto su precio directo al consumidor”.
“Muestra de ello es que en la última semana se realizaron quemas que superan los 20 mil ladrillos, de ahí que se trabaje en la construcción de un quinto horno, este perteneciente a la Empresa Provincial de la Construcción”.
El mejoramiento continuo del fondo habitacional figura entre los intereses de las autoridades masoenses quienes impulsan las políticas demográficas del país en correspondencia con el mejoramiento de las condiciones mínimas de hábitat y confort de sus pobladores.