Presidente de la República visita comunidades afectadas por intensas lluvias, en el municipio granmense de Jiguaní

El Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Presidente de la República, Miguel Díaz Canel Bermúdez intercambió este viernes con damnificados del municipio de Jiguaní en la provincia de Granma, severamente afectados por las intensas lluvias de la semana anterior.

Acompañado por Roberto Morales Ojeda, Miembro del Buró Político y Secretario de Organización del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, otros dirigentes políticos y gubernamentales, así como las máximas autoridades de la provincia el mandatario cubano constató las labores de recuperación que se realizan en los territorios afectados.

El Presidente camina las calles de Punta Brava, uno de los repartos más afectados, y a su paso pobladores conmovidos saludan, le dan la mano y gritan: estamos vivos, es lo más importante. “Pa lo q sea Canel”, reporta vía Facebook Mailenys Oliva, corresponsal de Granma.

También participan en el recorrido, Yanaisi Capó Nápoles, miembro del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y primera secretaria de la organización política en Granma y Yanetsy Terry Gutiérrez Gobernadora en nuestra provincia.

El encuentro de trabajo tiene como objetivo evaluar las afectaciones ocasionadas por las intensas lluvias y la marcha de las acciones de recuperación que han tenido lugar en el municipio.

Díaz-Canel sostuvo un intercambio de trabajo con las máximas autoridades del Partido Comunista de Cuba y del Poder Popular a nivel provincial y municipal en la Sede de la Galería de Arte Benito Granda Parada de esta ciudad.

Al concluir el intercambio y salir de la Galería, observó que muchos jiguaniseros aguardaban al frente, en el parque central, los que tuvieron la oportunidad de escuchar sus palabras.

Las precipitaciones iniciaron el día 9 de junio, con registros significativos al suroeste y las montañas, las que provocaron vertimientos y escurrimientos en las principales cuencas, procesos que se agravaron al ocurrir en la noche y la madrugada.

Las lluvias provocaron que los embalses, que en ese momento estaban al 54 por ciento de llenado, se incrementaran hasta el 95 por ciento; o sea, crecieron en breve tiempo en un 41 por ciento: 427 millones de metros cúbicos de agua.

Los territorios más afectados fueron Yara, Jiguaní, Manzanillo, Media Luna y Niquero. Quedaron aisladas 105 comunidades, de ellas 14 por deslizamientos de tierra y 91 por crecidas de ríos, con una población de 18 585 personas.

Como saldo negativo de las intensas lluvias asociadas a la vaguada que en los días anteriores afectó a gran parte del oriente del país, en esta provincia se cuantifican daños en más de un centenar de viviendas y en viales de varios municipios.

Según datos preliminares ofrecidos por las comisiones de trabajo de las direcciones provinciales de Vivienda y Vialidad, en Granma las mayores afectaciones a la infraestructura urbanística y rural se concentran en derrumbes de viviendas, de techos y paredes, así como daños parciales a otros inmuebles estatales, y la ruptura de varios kilómetros de carreteras, puentes y obras de fábrica.